La moda y la ropa está tan presente en nuestro días a día que en muchas ocasiones nos cuesta pensar en cuál ha sido la historia de esta disciplina, la costura y el corte y confección, tan propia del ser humano y presente desde el origen de nuestra especie. En esta primera entrada de nuestra breve historia de la costura abordaremos los orígenes de la costura y la edad antigua.
Pensar en el origen de la costura es remontarnos a los primeros humanos que habitaron nuestro planeta, el Paleolítico, y las adversas condiciones climáticas a las que éstos se veían expuestos. Por lo tanto, la confección de las primeras prendas de estas poblaciones estuvieron muy vinculadas a la protección contra el frío y estaban confeccionadas a partir de los diferentes animales que eran cazados con fines alimenticios.
Las pieles de estos animales eran curtidas y posteriormente se unían unas con otras, empleando para ello las primeras herramientas de costura conocidas, finos huesos afilados y puntiagudos, y tiras de cuero, tendones y tripas.
Se tiene constancia que en la ropa que se confeccionaba hace 25.000 años ya se empleaba lana animal y algodón como forro para el interior de las prendas creadas, y de como se empleaban útiles hecho a partir de ciertas plantas, como el Ágave, y fibras secas de origen vegetal utilizadas a modo de hilo para coser prendas de vestir.
En la Edad antigua, Persia, Egipto, Grecia y Roma, la ropa era considerada como un artículo a ser utilizado únicamente por las personas más acaudaladas, las cuales utilizaban túnicas de lino amarradas y enrollados al cuerpo con muy pocas costuras. Es en el mundo Persa donde encontramos los primeros registros de ropa confeccionada a medida o restauradas, además de la confección de zapatos de cuero con corbatas y otros complementos, realizados a partir del corte y costura de telas como la lana, el lino o la seda de China.
En la Antigua Grecia, las tareas referidas al trabajo con telas e hilos ya se insertaban en el contexto doméstico, en esta época exclusivo de las mujeres, en donde se producían telas de lana, seda y lino, las cuales se utilizaban como túnicas fruncidas y con un cinto hecho de cordones, botones y alfileres.
El acto de cortar y coser con una función de confección no la encontramos en la historia del corte y confección en la Antigua Grecia hasta el sigo IV, época en la que se empiezan a confeccionar prendas de más una pieza, normalmente añadiéndole las mangas a las túnicas.
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